Desembarcar en la bíblica ciudad de tu nombre
únicamente guiado por la luz del deseo,
y una vez más pedirte que me creas
cuando a ciegas proclamo:
"Ahora que te veo se que estoy mejor".
Sé que hay alguien en mí que escribe por mi mano... Podría buscar tiempos mejores pero amo tu tempestad...