LOS ADIOSES
He vuelto a leer de forma compulsiva, como en mi
adolescencia para huir del miedo y tal vez de la vida… Era mi forma de no
estar, era el nacimiento de la imagen que hoy soy, este chico triste y
solitario. Era ese confirmar: “me equivoqué de mundo y ahora estoy condenado a
permanecer en este, el vuestro”.
A mi lado, mientras paso páginas y subrayo versos, mi amigo en silencio, me pregunta:
-
Mendo, crees que sufrirías mucho si me marcho?Giro mi cabeza para evitarle descubrir en mis lágrimas el reflejo de la misma pregunta.